En la actualidad existen distintos modelos y tipos de autoclaves dentales, clasificados por el tipo de instrumental que se quiere esterilizar: en B y S. Estos equipos permiten esterilizar mediante vapor de agua a alta presión y temperatura, razón por la que resulta un dispositivo indispensable en clínicas dentales, ya que a través de ellos se logra la esterilización del instrumental odontológico.
Este instrumento está compuesto por un recipiente metálico de paredes gruesas y cierre hermético, que permite llevar a cabo la esterilización a alta presión, asegurando la máxima desinfección de todos los materiales de uso odontológico.
La principal función de un autoclave dental es eliminar los microorganismos y esporas presentes en el instrumental odontológico, coagulando sus proteínas y evitando así el contagio de cualquier tipo de infección, y garantizando asi que todo el material empleado en estas clínicas sea estéril. Los autoclaves dentales se emplean para la limpieza diaria de utensilios utilizados por los odontólogos, como pinzas o exploradores.
Autoclaves clase S
Es una clase intermedia entre los autoclaves N y B. Este tipo de equipos llevan a cabo un proceso de esterilización más completa que los autoclave clase N, pero son de poca efectividad en la esterilización de materiales textiles. Permiten la esterilización e instrumentos de una sola capa, de envasados multicapa y de instrumentos que no puedan se esterilizados en los autoclaves N. Por este motivo, no están sugeridos en la higiene de todos los utensilios empleados en las clínicas dentales.
Poseen por lo general una bomba de vacío que permite eliminar completamente el aire de la cámara antes de iniciar el proceso de esterilización. Pero utiliza un prevacío de una sola etapa, menos eficaz que el vacío utilizado en los autoclaves B.
Autoclaves clase B
Estos tipos de autoclaves son los más idóneos y recomendados para esterilizar cualquier tipo de instrumental odontológico: materiales empaquetados, textiles, utensilios con cánulas y huecos o cargas porosas. Los autoclaves clase B son los más sugeridos para clínicas dentales, según las normas de regulación internacionales, debido a que cumplen con todos los requisitos sanitarios y epidemiológicos.
Estos equipos permiten esterilizar todo tipo de lotes, incluyendo lotes complejos. Posee un prevacío fraccionado que permite eliminar por completo el aire de la cámara, lo que hace mas eficaz la esterilización de todo tipo de herramienta y material.
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