Un concentrador de oxígeno es un dispositivo médico, que opera de manera eléctrica y que actúa una fuente de suplemento de oxígeno confiable y eficiente. Este equipo funciona separando el oxígeno del aire ambiental, y recogiéndolo en un depósito, desde donde es liberado a través de un tubo para administrar al paciente en un porcentaje de 90 a 95%, lo cual le permite tener un suplemento de oxígeno de alta pureza.
Aunque el concentrador filtra el oxígeno del cuarto, no afecta la cantidad normal de oxígeno en su habitación. El concentrador usa un filtro que retiene el oxígeno y expulsa el resto del aire, lo humedece y lo envía al paciente, en forma apropiada, de acuerdo a sus requerimientos. En general permite generar oxígeno a razón de 5 litros por minuto. Al final, el resultado es oxígeno terapéutico en una concentración casi pura (93%).
¿Para qué se utiliza un concentrador de oxigeno?
Estos dispositivos se emplean normalmente como fuentes estacionarias para proporcionar terapia de oxígeno a largo plazo a los pacientes en el hogar. Tambien se emplean en hospitales como un método económico para suministrar oxígeno de bajo flujo y baja presión cuando no se requiere o no está disponible oxígeno a alta presión (cilindros de oxígeno comprimido o tanques de oxígeno líquido).
Los concentradores de oxígeno se fabrican con capacidades de 3, 5, 8 y 10 L/min, según el modelo. La evaluación de las necesidades de oxígeno es imprescindible para determinar el flujo máximo que un concentrador de oxígeno debería suministrar.
¿Qué ventajas tiene un concentrador de oxígeno?
Es un aparato portátil, que requiere poca energía y es apto para cualquier espacio, limpio y seco. Para el mantenimiento, basta con lavar periódicamente el envase humificador. Tener agua destilada para humidificar el oxígeno es suficiente.
Especificaciones técnicas de un concentrador de oxígeno
- El concentrador debe entregar una concentración de oxígeno de al menos el 90% en todo el rango de configuraciones de flujo.
- Debe estar equipado al menos con un flujómetro integrado con control de la tasa de flujo.
- Debe tener un monitor o analizador de oxígeno para controlar la cantidad de oxígeno producida y alertar cuando la concentración desciende por debajo del rango terapéutico.
- Debe incorporar filtros de partículas gruesas en la entrada de aire para evitar que el polvo y la suciedad penetren en el dispositivo.
- Debe incorporar alarmas para advertir sobre interrupciones de energía, filtros sucios,
- fluctuaciones de presión y otras fallas del sistema.
- Debe ser suministrado junto con un manual del usuario que sea apropiado y describa los pasos detallados del proceso.
¿Dónde debe ubicarse un concentrador de oxigeno?
Preferentemente en el lugar en donde el paciente pase la mayor parte de su tiempo. Debe ser un área seca, bien ventilada, en la que no reciba luz directa del sol ni, en caso de lluvia, pueda verse afectado por salpicaduras o humedad. Debe estar separado al menos 15 cm de cualquier superficie como pared o muebles. Debe estar lejos de cualquier superficie caliente o fuentes de calor, tales como motores, rejillas de aire caliente, calentadores de cualquier tipo.
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